Astro noble sus
rayos vida crean cercana
al planeta elegido
da luz y sombra arcana,
antes de que
girara la fe copernicana
te adoraban en
tiempos de una era lejana.
Venerado al inicio
por algún ser pagano
cubres cabeza
altiva del fatuo ser humano,
precursores de
miedos de un dios justo y tirano
la conciencia fue
oculta, opio queda en su mano.
El orbe tú
alumbraste de explosión acertada
los dioses no
nacidos buscaban la alborada,
en la Tierra quedó
ya la vida asentada
ahí siempre
estarás pues sin ti no habrá nada.
¡Oh dioses
adorados! Del nimio ser humano
fuisteis los
inventores de usar su nombre en vano,
hasta que las
razones del juicio darwiniano
demostraron que el
Sol es el dios más decano.
Antonio Nieto Bruna
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3-8-2014
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