Introducción
A continuación se exponen unas series de normas a tener en cuenta para la
construcción de las sílabas en la métrica clásica, en los casos en lo que
coincidan dos vocales o más en una o varias palabras de un verso.
Decía
Tomás Navarro Tomás en su «Manual de pronunciación española» (Madrid, 1918): Hay quienes se han esforzado
inútilmente en reducir a reglas fijas tales vacilaciones; dada la libertad de
que la lengua dispone en este punto, lo único posible es tratar de señalar en
cada caso la forma que hoy tiene un uso más corriente en la pronunciación
correcta...
Una
de las metodologías para tratar de discernir algunas reglas básicas es ir a los
versos de los grandes poetas, quienes nos guiarán acerca de las causas de estos
fenómenos, donde podremos apreciar algunas reglas muy simples y otras algo
menos, pero que con la práctica magistral del estudio de los poemas de estos
autores podremos ir apreciando las normas para la composición de la poesía
clásica.
El intento de normalizar y encontrar reglas fijas en el tema de sinalefas e hiatos, es poco menos que imposible, pero estas normas, pueden servir de guía en la mayoría de los casos, por lo que trataremos de ver sus aplicaciones y algunas de las excepciones de estas normas, más allá de las reglas específicas y de su forma de usarlas.
RECURSOS POÉTICOS
Sinalefa
Es la unión prosódica entre vocales vecinas pertenecientes a distintas
palabras; no se debe confundir con el uso del diptongo, el cual solo se aplica
en una única palabra. Por lo tanto en la sinalefa, las palabras de un verso
suman en conjunto menos sílabas que si se cuentan las que tiene cada uno de
ellos en un uso estricto de la ortología de la lengua castellana.
La sinalefa puede verificarse incluso después de signos de puntuación,
entonación e incluso de la raya, signo auxiliar usado en el diálogo.
Las sinalefas que unen solo dos vocales se llaman binarias y representan las más
sencillas y usuales. En las sinalefas binarias podemos observar en una palabra
terminada en vocal, que es sucedida por una palabra que comienza en vocal que la
sinalefa, es la unión de los sonidos de dichas vocales en una única emisión de
voz, o sea en una sílaba rítmica.
Ejemplo:
Viendo
que (se en)riquecían
de
manera po(co ho)nesta…
También pudieran ser, ternarias cuaternarias e incluso quinaria aunque esta última es poco usual.
En
la versificación se toma en cuenta solamente el uso fonético, no el uso
ortográfico, por lo tanto en el uso de vocales mudas, por ejemplo la
"u" cuando actúa con las consonantes "g","q",
dicha vocal no cuenta a la hora de la denominación de las sinalefas por la
cantidad de vocales que la componen.
En toda sinalefa múltiple es indispensable que en el centro del grupo vayan
vocales fuertes (a,o,e); las débiles (u,i) solo pueden ir en los extremos. Si
sucede que la «u», y especialmente la «i», ocupan el centro, no hay sinalefa.
No forman sinalefa los grupos uia, uie, eui, iui.
Cuando las vocales «e, i, o» y «u» cumplen la función gramatical de conjunción,
tampoco forman sinalefa.
Para
todos los casos de sinalefas múltiples: la h, por ser letra sin sonido, no
impide la sinalefa, a menos que vaya seguida de los diptongos «ia, ie, ui, ue».
Hiato
Consiste en separar las vocales concurrentes de distintas palabras. El hiato
constituye un choque de vocales que a veces se produce naturalmente, y otras se
origina de manera artificiosa al requerir para su realización, de una
pronunciación enfática cuando así lo precise la declamación del verso.
El acento final o interior de verso y muy marcado en una de las vocales, suele
favorecer el hiato. Fuera de este caso, se desaconseja el uso del hiato.
Está universalmente admitido que nunca hay sinalefa en un encuentro de tres
vocales cuando la del medio es una vocal más alta que sus vecinas, tónica o
átona.
El
hiato no es siempre tolerable al oído; por el contrario, a veces resulta
francamente cacofónico. En algunos casos es un defecto en el cual incurren, en
ocasiones, hasta buenos poetas. La lectura, mejor que la teoría, permitirá
discernir estos matices. Por lo tanto, en una palabra terminada en vocal, que
es sucedida por una palabra que comienza en vocal el hiato, es la pronunciación
de los sonidos de dichas vocales en dos emisiones de voz, o sea en dos sílabas
rítmicas. Decir que hay hiato, es lo mismo que decir que no hay sinalefa. El
hiato es frecuente cuando la vocal inicial de palabra lleva acento de
intensidad rítmico, especialmente en el caso de la penúltima sílaba del verso.
Ejemplo de un Hiato en un verso octosílabo 7+1=8:
lo i-nex-pli-ca-ble-(que-es)
Dialefa
Cuando se encuentran dos acentos en el verso en general uno de ellos predomina
sobre el otro, remitiéndonos a uno de los casos anteriores. Este predominio
suele ser asociado a la semántica, hay acentos más débiles que otros. Suelen
ser fuertes los acentos de los sustantivos, de los verbos, de los adjetivos
cuando siguen al sustantivo, más débiles los de los adverbios o las partículas
auxiliares gramaticales como «un» o «este». La debilidad relativa de los
acentos depende del énfasis, el poeta o el rapsoda que interpreta un poema
ajeno, deberán juzgar acerca de ella.
Acentos rítmicos en las sinalefas
Como ya hemos visto, la sinalefa es la unión prosódica que se produce entre
vocales inmediatas pertenecientes a distintas palabras.
Las principales influencias que ejerce la realización rítmica de un verso sobre
esta figura fonética, especialmente en el aspecto de su no concreción radica
básicamente en:
Cuando
interviene el acento estrófico del verso.
El acento rítmico indispensable es el llamado acento
final, que recae en castellano sobre la penúltima sílaba métrica del verso;
para entender esto hay que tener en cuenta que en la versificación castellana
si la palabra es esdrújula sólo cuentan como una las dos últimas sílabas y si
es aguda se contabiliza una sílaba más; éste es el motivo por el que este
acento siempre recae en la penúltima sílaba a efectos métricos.
Cuando
interviene el acento rítmico del verso.
La no sinalefa es preceptiva cuando la posición del ritmo así lo requiera. En
estos casos, aun cuando la sinalefa sea legítima, el hiato es preferible, pues
bajo la influencia del ritmo suele adquirir singulares condiciones de eufonía.
En consecuencia, debe evitarse hacer sinalefa en las posiciones donde los
acentos rítmicos actúan como ejes de ordenación vertical, especialmente en la
penúltima sílaba de un verso.
En
el endecasílabo, además del acento estrófico, la sinalefa no puede darse en las
sílabas cuarta, sexta u octava cuando dichas posiciones establecen su ritmo. Lo
mismo puede decirse cuando esté acentuado en 4° y 7° sílabas (ritmo dactílico)
o en 5° (galaico antiguo).
Son contadas las oportunidades en que esta situación pueda aparecer, pero ante
la duda, siempre es deseable buscar otra palabra para evitar la contrariedad.
En
los casos de estructuras de versos compuestos entre los hemistiquios del verso,
la cesura impide la licencia.
Sinéresis
Consiste en unir en una sola sílaba dos vocales de una misma palabra, que
gramaticalmente no forman diptongo. Es ésta una licencia poética porque diptongar
artificialmente vocales es solo admisible en el verso para disminuir una
sílaba, de ser esto necesario.
Esta licencia es lícitamente factible cuando ninguna de las vocales
involucradas está acentuada: (traerá, ahorrar, teatral, núcleo, coalición,
héroe, poesía, etc.) o, si teniendo acento, éste recae en la primera de ellas
en los grupos ao, ae y oe: (caos, trae, roe, etc.)
Pero no lo será cuando en los diptongos oa, ea y eo lleve
acento la primera vocal (loa, aurea, feo, etc.) ni cuando caiga por naturaleza
el acento en la segunda vocal: croaba, poeta, teatro, ahogo, real, león, etc.
En los grupos de vocales iguales (aa, ee y oo)
la sinéresis se da tanto si las vocales son inacentuadas ambas (Saavedra,
vehemente, dándoos, etc.) o, si teniendo acento, éste recae en la primera de
ellas (cree, lee, etc.); pero no cuando la segunda lo esté: albahaca, azahar,
creer, loor, leer, etc.
Diéresis
Es una licencia opuesta a la sinéresis y su efecto es también contrario: alarga
el verso en una sílaba. Consiste en pronunciar separadas las vocales de un
diptongo, las que no deben separarse en la pronunciación normal.
En la escritura de los versos, esta licencia se indica con el signo del mismo
nombre: la diéresis o crema ( ¨ ).
No debe confundirse con las palabras conformadas por los grupos «güe, güi»,
donde la vocal «u» lleva diéresis a los efectos de su pronunciación: bilingüe,
pingüino, etc., palabras que silábicamente se separan «bi–lin–güe»,
«pin–güi–no» y no «bi–lin–gü–e», ni « pin–gü–i–no».
Sinafía
Cuando
existe sinalefa entre la vocal final de un verso que termina en palabra llana y
la vocal inicial de la primera sílaba del verso siguiente, se le llama a tal
licencia poética sinafía. La mayor parte de los poetas que empleaban esta
licencia lo hacían cuando al menos uno de los dos versos actuaba como pie
quebrado, (Verso más corto que el resto, en una frecuencia de versos con el
mismo número de sílabas) y se explica por la falta de autonomía tonal del verso
corto. La utilización de la compensación por sinafia ha quedado en un uso
residual de la poesía actual, se debe saber que tuvo su auge en el Siglo XV y algunos
poetas, mayoritariamente la usaron con versos de arte menor.
A continuación se muestra cuatro ejemplos del poema COPLAS A LA MUERTE DE MI PADRE, donde Jorge Manrique utiliza la sinafia.
…se
– sú – me – su – grán – al – té – (za
en) – és- ta – ví – da…
…ni
es – tár – es –tá – ble – ni – qué – (da
en) – ú – na – có – sa…
…y
– la – muér – te – la – ce – lá – (da
en) – que – ca – é – mos?..
…el
– á – ni – ma – glo – rï – ó – (sa
an) – ge – li – cál…
Metodología
La
teoría descrita tiene a continuación los ejemplos necesarios para poder aplicar
sus elementales y sucintas normas.
Se ha de decir que esta no es una ciencia exacta y que el intento de normalizar
y encontrar reglas fijas en las formas de las sinalefas y los hiatos, es poco
menos que imposible, pero estas normas, pueden servir de guía en la mayoría de
los casos, a partir de ellas, cada poeta intenta desarrollar sus composiciones
adaptando las normas a su idiosincrasia, por lo que a continuación veremos
algunas de las excepciones que abonan la metodología de dichas normas.
Para
comenzar diremos algo tan obvio como que el orden alfabético de las vocales es:
a – e – i – o - u
Pero
a efectos de su estudio, se ha clasificado a las vocales con orden jerárquico
en cuanto a su valor prosódico, yendo de la más fuerte, abierta o dominante a
la más débil y absorbible o cerrada.
a – o – e – u – i
Las
tres primeras, se denominan fuertes, llanas o abiertas, (a – o – e)
Las dos últimas, se denominan débiles o cerradas (u – i)
1º - Cuando
la primera vocal es más abierta que la segunda.
2º - Cuando la segunda vocal es más abierta que la primera.
3º - O cuando las dos vocales son iguales.
Para el 1º caso el uso y alternativas son:
a-o;
a-e; a-u; a-i;
o-e;
o-u; o-i;
e-u; e-i;
u-i.
Según
el orden de la acentuación prosódica de cada grupo de vocales el modo establecería
la SINALEFA o el HIATO:
Ninguna de las vocales acentuadas..…SINALEFA
Las dos vocales acentuadas…………..HIATO
La primera de las vocales acentuada…SINALEFA
La segunda de las vocales acentuada…HIATO
Como norma general se observará:
En pares de vocales (fuerte – débil)
Que si la segunda vocal es no acentuada, hay SINALEFA
Que si la segunda vocal es acentuada, hay HIATO
Ejemplos
(fuerte – débil)
“dejó con un(a e)xhalación mortal.” SINALEFA
“se puede hacer a / otros
comprender” HIATO
Para el 2º caso el uso y alternativas son:
o-a; e-a; u-a; i-a;
e-o; u-o; i-o;
u-e; i-e; i-u.
En pares de vocales (débil – fuerte) se pueden dar cuatro casos:
Ninguna de las vocales acentuadas..….SINALEFA
Las dos vocales acentuadas…………...HIATO
La primera de las vocales acentuada… HIATO
La primera de las vocales no acentuada...SINALEFA
Como norma general se observará:
En pares de vocales (débil – fuerte)
Que si la primera vocal es no acentuada, hay SINALEFA
Que si la primera vocal es acentuada, hay HIATO
Ejemplos (débil – fuerte)
“un ente (de ál)ma y forma
misteriosa.” SINALEFA
“solo cerrando el terceto - tú de a(quí - has) de salir” HIATO
Y para el 3º caso:
a-a; o-o; e-e; u-u; i-i lo mismo que el anterior.
O sea, que como norma general:
En pares de vocales iguales
Cuando la primera vocal es no acentuada, hay SINALEFA
Cuando la primera vocal es acentuada, hay HIATO
Ejemplos: (vocales iguales):
Ninguna de las vocales acentuadas…..SINALEFA
“la figura (que
es)tá en la
habitación.”
Las dos vocales acentuadas…………..HIATO
“no seré / esa
forma imaginaria.”
La primera de las vocales acentuada…SINALEFA
“termina(rá a)trapado en sus hedores.”
La segunda de las vocales acentuada…SINALEFA
“Pues siendo este (su
ú)nico lugar”
REGLA SUPER SIMPLIFICADA:
Acento en la débil: …HIATO
Sin acento en la débil: SINALEFA
La “h” con que empiezan algunas palabras,
impide la sinalefa cuando siguen las letras ue, uy, ie
Cogió / huevos de su nido
Le / huyo
de su memoria
Me / hiere
tú indiferencia
Las triples sinalefas o ternarias, se forman cuando la vocal del medio es más
abierta que las extremas; ejemplo (o-a-e); nunca (a-u-e).
Además, tiene que cumplirse la regla de sinalefas entre 1ª y 2ª, y entre 2ª y
3ª vocales.”
Bibliografía
Tomás
Navarro Tomás «Manual de pronunciación española» (Madrid, 1918)
Eduardo
de la Barra «Métrica castellana» (Santiago de Chile 1887)
No hay comentarios:
Publicar un comentario