Hoy treinta años nos contemplan
desde esos primeros días
que con sonrisas hermosas
y las miradas perdidas,
a los padres y a las madres
en busca de una salida
alentaron a lograr
a aquellas treinta familias
un presente y un futuro
que dieran a nuestras vidas.
Después de tantas vivencias
buenas, malas y sufridas
estamos todos contentos
al veros con la alegría
de saber que nuestra empresa
nunca quedará baldía
y al mañana lo esperamos
con vuestra angustia sabida
comprendiendo que el esfuerzo
no es una causa perdida.